Hoy siento la necesidad de contar un poco de mi historia personal, mis comienzos como mamá.
Conocí a Jorge a los 17 años y desde ahí caminamos juntos este camino por 23 años hasta hoy, él es ocho años mayor que yo lo que hacía en aquellos tiempos que tuviera más en claro sus proyectos y sus deseos, él tenía la certeza que formaríamos una familia juntos, cosa que a mi me aterraba!!
Casi seis años de novios y llegó el esperado casamiento ya que la familia estaba bastante resignada a que no lo haríamos nunca, por aquellos tiempos estaba la moda de "juntarse"
Jorge felíz, ya se veía con un bebe en brazos, pero tubo que esperar mis tiempos, yo necesitaba internamente estar totalmente entregada a la experiencia de ser madre, disfrutar desde el primer día la llegada de un hijo, demoré un año en tener esa seguridad, tuve que despojarme de muchos miedos, los cambios en mi cuerpo, el parto, amamantar, cuidar a un bebe las 24 hs (tenía experiencia en cuidado de niños ya que como tengo hermanos mayores he cuidado de mis sobrinos, dar mamaderas, cambiar pañales, llevarlos de paseo, darles un baño era hermoso, pero ellos no eran mi responsabilidad) me autopresionaba, quería ser una madre perfecta para ese niño que traería al mundo; por suerte comprendí en todo ese año de autotorturarme que las mamás somos mujeres, que como tales no somos perfectas y que todo lo que mi bebe necesitara lo iba a aprender a su debido tiempo, tuve que confiar en mi instinto plenamente, ciegamente!! y lanzarme al abismo!!!, como lo llamo yo porque en un primer embarazo la sensación era esa, todos te dicen cómo será pero solo vos sabés cómo es, la experiencia de los demás no es la tuya ni tiene porque serlo, ni aún la de tu madre con toda la carga que conlleva!!! Si bien después nos encontramos repitiendo patrones , ese es otro tema.
Me sentía tan bien y con tanta energía durante el embarazo que no paré un instante, tanto fue así que hice una preeclampsia, tres días de internación sin lograr estabilizar la presión y cesárea unos días antes de la fecha de parto.
No se qué fue, pero algo se despertó en mi en el preciso momento en que pusieron a Luz en mi panza y salimos de la sala de parto, yo sentía lo que ella sentía!!!, la angustia por haber sido arrancada de su espacio de confort, las manos extrañas que la toquetearon, las luces que encandilaron sus ojitos, los ruidos que antes eran lejanos ahora aturdían sus oídos, yo sentí la necesidad de calmar todo esto, hacerle saber que ya todo había pasado y abrazarla, tenerla cerca todo el tiempo!
Luz era perfecta y en dos días en casa, arrojadas al abismo puro porque acá comienza el camino, la familia pretende ayudar y te llenan la cabeza con lo que "debés hacer", qué comer, qué no comer, cuándo dormir, qué productos usar para el bebé y para vos y que no usar, cómo dar la teta, a quién se parece más el bebe, tiene los ojos de tal, pero la boca es de tal, pero la forma de la cabeza es de tal, y cuánto que duerme y ya te bajó la leche?.....
SILENCIO!!!!!
Por suerte mi pudor de madre primeriza hacía que nos retiremos a un espacio de intimidad, donde solo estábamos Luz, yo, la teta, caricias y miradas que aún hoy 15 años después no puedo evitar recordar sin que mis ojos se llenen de emoción.
Todo lo que necesitábamos era estar pegada la una a la otra, eso hizo que me transformara en una madre egoísta, porque no prestaba al bebe, raro era que le dijera a alguien -querés hacerle upa?, no dejaba que la molestaran si dormía, pasaba rato mirándola dormir, su cuna estaba pegada a mi cama, que me permitía masajear sus pies y manos.
La pregunta que siempre me hice es - qué necesita ella? y cómo puedo yo acercar eso de la manera más natural posible?, así comenzamos un camino de aprendizaje y desarrollo que aún hoy continúa, y que está bastante alejado del mercado de consumo, nunca usamos andador, no corral, el coche era el viejo y queridísimo paraguitas que se plegaba y entraba en cualquier lado y que apenas empezó a caminar no hubo quien volviera a sentarla allí, muy poco calzado, solo para salir y con suelas muy flexibles casi como estar en patas ( esto hizo que nuestra casa sea una casa de pies descalzos!!), poca ropa preferentemente de algodón, siendo yo hija de tejedora, costurera y cocinera, priorizamos los productos hechos a mano, no solo por su calidad sino por lo que traen con ellos, el amor de la persona que los realiza;los juguetes llovían a cataratas y ella después de manipularlos elegía cuáles quedaban en casa, así aprendí que "la caja" en la que viene envuelto el super juguete 3000 que hace luces estrafalarias y música electrónica con 200 sonidos diferentes es lo que posibilita el juego, que la muñeca de tela quedaba arrastrada por toda la casa, con una pata menos y el vestido hecho jirones mientras que la de goma seguía intacta, que los bloque, los cuentos, la música y cantar y jugar con nosotros eran sus preferidos y por sobre todas las cosas nunca le hablé ni permití que se le hablara con palabras como pipi en vez de pájaro, papa en vez de comida, gol en vez de pelota, etc y siempre llamamos las cosas por su nombre sobre todo la vagina y el pene!! Cosa que me costó mucho trabajo que comprendieran los abuelos y demás adultos. La comida llegó a partir del sexto mes, prefiriendo las verduras a las frutas, para el año ya comía de todo a pesar de las miradas horrorizadas de algunos adultos de la familia!
Una cosa que siempre tuve muy en claro era que no quería un solo hijo, perdón para aquellos que lean y sean únicos pero siento que es muy egoísta tener un solo hijo, siento que es un hijo al cual se lo asfixia, obviamente sin intención, pero cuando "todo" es para uno.... y lo confirmé al casarme con un hijo único!!
Por suerte Jorge compartía mi visión y así trajimos a Paz, extrañamente con más miedos y dudas que el primer embarazo, otra vez volvió la madre perfecta, no quería que Luz se sienta desplazada y así sintiera rechazo hacia su hermana y a la vez quería ofrecerle a Paz la misma dedicación que había tenido con Luz.
Este embarazo fue diferente, ya había aprendido y me relajé y disfruté de la panza, igualmente como ya había cesárea previa teníamos fecha de cesárea también, por sorpresa horas antes de la internación comencé con contracciones, me internaron, todo iba perfecto para mí, las contracciones las pasaba sin problemas y estaba acompañada por Jorge, hasta que me pusieron suero y una sonda que impidieron mi libre movimiento!! a partir de ahí todo fue muy angustiante, yo solo quería salir de esa situación, tacto y la bebé flotante!, a cesárea!.... otra vez, angustiada porque tenía la esperanza de parir vaginalmente a mi bebé, pero feliz porque no toleraba más esa situación!!
Paz más upa que Luz, esa primera noche no estuvo en la cuna ni por un instante, por esas cosas de la vida el hospital donde estábamos no permitía familiares en la sala a menos que la mamá tuviera suero, como no era nuestro caso, quedamos solo las dos, para muchos puede parecer desastroso pero para nosotras fue perfecto, después de un día agotador, había silencio!!!, las enfermeras siempre atentas y una noche bastó para reponer energías, tanto que al otro día a casa!!!
Ya había recorrido un gran camino de aprendizaje con Luz, lo que hizo que con Paz fuera más relajada, sabía algo muy importante.... reconocer los llantos y ruiditos que me permitían resolver con rapidez.
Con Paz nos pasó algo extraño, al rededor del quinto mes cuando nos veía comer empezaba a los gritos y nos miraba las bocas, sin pedir autorización a la pediatra, le di un pedazo de durazno en la mano y ella lo devoró, quedé boquiabierta! y dije, esta bebé tiene hambre!!!, a partir de ahí comencé a incorporar de todo ahora si bajo la aprobación de la pediatra, que me conocía desde chica, porque había sido mi pediatra y era una persona muy especial, además era médica de adultos mayores, ella decía que los niños y los ancianos son iguales, asi que su consultorio era un popurrí!!, era amiga de la familia y cuando los chicos se enfermaban ella sabía que la cosa venía por la expresión de algún cambio en la casa, y si bien medicaba lo hacía desde un lugar de conciencia y conocimiento del conflicto que había detrás de la enfermedad, sus consultas con ella eran extensas, conversaba mucho conmigo y generalmente de cosas que no tenían que ver con los chicos, me atendía a mi!, me escuchaba, me dedicaba tiempo, lo escuchaba a Jorge y de paso veía a los chicos, que por supuesto siempre estaban bien, más que una fiebre, anginas, cosas normales del crecimiento!!
Al tiempo empecé a notar a Jorge falto de energía masculina, casi todo lo que lo rodeaba en su intimidad era femenino, hasta la perra!!
Me planteé hacer un tercer intento y jugarnos, si venía otra nena y bueno, era su destino estar rodeado de mujeres, aunque el lo disfruta porque cuando llega las primeras en salir corriendo a abrazarlo son ellas y lo atienden y le hacen masajitos y le ponen el babero también!!!
No hay palabras con las que pueda describir lo que sentimos cuando nos enteramos que en vez de un bebé, había "dos"!!!!
Si antes había miedos..... bueno ahora..... ni que hablar!!!!
Lo peor fue económicamente hablando, la casa donde vivíamos era minúscula, el auto que teníamos ya no nos servía, los brazos con los que contábamos no iban a dar a basto!!!! ESTADO DE SHOCK!!!
Así quedamos por unos días hasta que fuimos asimilando de a poco, hicimos una pequeña reforma en la casa y compramos un auto medio pelo que nos llevaba a todos!!
Este embarazo fue impecable, nada fuera de lo normal, yo dejé todas mis actividades para dedicarme exclusivamente a mis hijos, en el quinto mes de embarazo ya tenía la misma panza que cuando me interné de Luz, al séptimo mes reposo casi absoluto, moverme me provocaba contracciones y me costaba mucho respirar por lo que tenía que dormir sentada, asi que cuidados extremos, obviamente cesárea programadísima, nuestro médico ya nos conocía y permitió que Jorge presenciara el parto, cosa que me dió mucha alegría, él estuvo con los bebés todo el tiempo, ya en la sala la neonatóloga nos contó que en 20 años de profesión era la primera vez que tenía que pesar dos veces a los bebés, pesados en balanza electrónica no tenían ni un gramo de diferencia, 2730 kg cada uno, por primera vez tuve los famosos dolores de entuerto, pero nada que no se pase con un calmante y respiración y relajación, contuvimos a la familia y amigos para que no se agolpen ya iban a tener tiempo de conocer a Ian y a Teo que como no podía ser de otro modo al otros día a casa!!!
No fue nada fácil, con cuatro niños, Luz de 4, Paz de 2 y Ian y Teo recién nacidos, el primer año fue bastante caótico, di de mi todo lo que pude y un poco más también, necesitamos organizarnos, distribuir tareas y todo el que venía de visita tenía que atender a algún niño!! jajaja!!!! Mi papá a sus 70 años por primera vez dió mamaderas y cambió pañales. De verdad esta vez no podía sola!!! La exclusividad de la teta duró muy poco, al mes y medio necesité darles mamadera de mi leche con una cucharadita de cereal de arroz que los saciaba y dormían al menos dos horas, ellos se alternaban, cuando uno dormía el otro tomaba la teta, cada cuál tenía la suya y se ve que una sola teta no los satisfacía, yo dormía de 15 a 30 minutos entre uno y el otro y de día la madre perfecta hacía las actividades de siempre para Luz y Paz, leer cuentos, cantar, bailar, llevarlas al jardín (en esa época estaban escolarizados), participar de reuniones, ensayar para la obra de fin de año, preparar souvenirs para los cumples, torta y encargarme de la casa!!! Todo esto hizo que no pudiera disfrutar de dar la teta, estaba realmente agotada, para el quinto mes ya habían dejado la teta y solo tomaban mamadera y comenzaron con las frutas.
A los siete meses Ian y Teo caminaban por toda la casa agarrándose de los muebles, casa minúscula, muebles muy cerca unos de otros, amplia diferencia entre los varones y las mujeres, los mellizos se potencian, al año movían muebles entre los dos para trepar y alcanzar cosas!
Junto con los cambios que tuvimos que realizar vino la decisión de mudarnos de ciudad, cosa que hicimos cuando Ian y Teo tenían dos años, el cambio de aire nos renovó a todos, el contacto con la tierra, el verde y el aire puro fue un cambio muy importante en nuestras vidas, el caos que provocaba el encierro entre cuatro paredes en la ciudad hacía que se enfermaran muy seguido y aparecía lo que yo llamo el efecto dominó, empieza uno y van cayendo de a uno, desde que nos mudamos prácticamente no se han enfermado.
Hoy Luz tiene 15 años, Paz 12 y Ian y Teo 10, hoy se habla de parto respetado, crianza con apego, lactancia prolongada, hay estudios y métodos para criar a los niños más libres y más naturalmente, supongo que todo esto ha sido fruto de madres que como yo han observado el crecimiento y desarrollo de sus hijos tratando de brindar lo mejor no desde lo que ofrece el mercado en "calidad", sino desde su ser, desde su instinto, el más animal para mi que puede haber, el instinto de defender a la cría, el que te ayuda a reponerte de una operación en unas horas para sacar fuerzas para brindarte entera a pesar del dolor, con amor!
Seguramente cometí millones de errores, irreparables, el tiempo no vuelve atrás, pero no me importa, estoy feliz con lo que di, se que di lo mejor de mi en cada momento, cada embarazo fue diferente y cada crianza fue diferente porque cada momento era diferente y las circunstancias también, las madres no somos islas en medio del océano, estamos rodeadas de un entorno que puede ser mejor o peor depende quien lo juzgue y para mi lo único importante para el bebe es que su madre esté presente, que lo mire y que lo vea, que lo escuche y que lo sienta, que lo abrace y lo contenga, todo lo demás es adorno que por supuesto puede sumar pero nunca va a restar porque si el bebé tiene todo de su madre es feliz! y yo se que ellos me tuvieron y me tienen, la conexión no se ha cortado, aveces me preguntan - cómo hacés para saber? y yo me rio y les digo - y mamá sabe!!
Aún los siento como el primer día y supongo que será así hasta el último día de mi vida y quizás más allá también.
Feliz de saber que muchas experiencias dolorosas han hecho que hoy muchas madres y bebés tengan experiencias amorosas, feliz de saber que si mis hijas deciden ser madres lo van a hacer desde el amor y el conocimiento que hoy está al alcance de la mano, feliz de saber que mis hijos serán padres dignos de acompañar a sus mujeres en el proceso de gestación, parto y crianza de un hijo, con todo el amor que un bebé merece!!!
Gracias por haber leído este extenso pero muy sentido artículo!!
Mariana-
